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La reflexología neuromuscular  es una disciplina que comprende el cuerpo humano como una sola unidad conectada y no como un conjunto independiente de órganos. 

Con esta visión los tratamientos que se aplican buscan el alivio de las dolencias a través de la recuperación del equilibrio general, a nivel orgánico, en vez de buscar el alivio donde se haya la dolencia.

A este concepto se le añade otro tipo de aplicación, llamada homeostasis, o mejor dicho el mantenimiento necesario que necesitan los organismos vivos para poder mantenerse en unas condiciones óptimas, como podría ser la autorregulación de temperatura o el mantenimiento de unos niveles correctos de pH.

Por lo tanto, la reflexología neuromuscular nos permite preservar todas las funciones vitales en su correcto funcionamiento, ahondando sobretodo en el sistema muscular (músculos, tendones, ligamentos, así como vasos sanguíneos y linfáticos).

A partir de esta introducción acerca de que es la reflexología neuromuscular, podremos entender mejor que beneficio nos reporta de cara a nuestro día a día.

Beneficios de la reflexología neuromuscular

Una de sus principales bondades es su mínima intrusividad en el cuerpo humano en comparación a otro tipo de terapias más normalizadas en nuestros tiempos. Como hemos introducido anteriormente, la reflexología neuromuscular no busca erradicar la dolencia directamente, sino analizar el foco que la origina para corregirlo y evitar una reincidencia en un futuro. De esta manera estaremos fomentando una autocuración del organismo sin depender de otro tipo de sistemas más invasivos o agresivos, como podrían ser los fármacos o aplicación de aparatología fisioterapéutica.

Y es que, ante ciertos problemas, está mas que demostrado la capacidad autoregenerativa de la que dispone nuestro cuerpo, adaptandose a la lesión y a las agresiones externas y por lo tanto, actuando para solventar las dolencias. La reflexología neuromuscular ayuda al cuerpo en las capacidades autocurativas como la cicatrización de sus heridas, soldar fracturas óseas, cerrar ulceraciones, etc.